Quien bien gane, bien gaste, pero no malgaste.
El oro hace soberbios, y la soberbia, necios.
A cada cerdo le llega su San Martín.
Muerto el perro, se acabó la rabia.
Ni bebas agua que no veas, ni firmes cartas que no leas.
Quien siembra vientos recoge tempestades.
Quien quita la ocasión, quita el pecado.
Bueno es que haya ratones, para que no se sepa quien se come el queso.
La palabra es plata y el silencio es oro.
La letra con sangre entra.
Dios aprieta, pero no ahoga.
Agua pasada no mueve molinos.
Ningún hombre honesto se hace rico en un momento.
De fuera vendrá quien de casa te echará.
Amigo reconciliado, enemigo doblado
0 comentarios:
Publicar un comentario